Legendario puerto de cabotaje, por el cual se exportaba casi todo el henequén que se producía en el estado a principios del siglo XIX. Su calurosa sonrisa está en sus playas, y por supuesto, en sus exóticos escenarios naturales. Las bellas aves migratorias, como el pato canadiense, que arriban puntuales cada año buscando el cobijo de los tranquilos mares de Sisal, le dan la bienvenida.

Aquí también son dignas de visitar, las fortificaciones que los antiguos moradores del puerto edificaron para protegerse de las incursiones de los terribles piratas.

Sisal se localiza a 52 km de Mérida. Para llegar le recomendamos tomar la carretera federal No. 281 desde Mérida con rumbo directo a Sisal. Desde aquí, a pocos kilómetros encontrará el acceso a Chelem, que se encuentra a solo 9 km de Puerto Progreso.

Este último sin duda será la delicia de cualquier visitante nacional o extranjero, pues cuenta con fabulosas instalaciones turísticas, en las que periódicamente se realizan carreras de lanchas y torneos de windsurf y pesca, pudiéndose practicar también diferentes deportes acuáticos como natación y esqui. Puerto Progreso dista solo 36 km de Mérida, siendo la ruta más adecuada para llegar la carretera federal No. 261.

Si su interés al visitar Yucatán tiene más relación con una aventura ecoturística, no deje de visitar el Arrecife de los Alacranes, localizado a 65 millas (130km) al norte de Puerto Progreso. Este sitio, además de ser un refugio natural para cientos de especies de aves marinas, es un lugar adecuado para practicar la modalidad del buceo que se efectúa en los sistemas arrecifales, sin duda uno de los más emocionantes que pudiesen efectuarse en un medio natural como lo es este.

Le aconsejamos informarse adecuadamente sobre los paquetes que ofrecen las agencias de viajes especializadas en tales excursiones.

Definitivamente, visitar la costa yucateca es dejarse sorprender y consentir por sus encantos; es saturarse de aire limpio y de aguas transparentes y tranquilas, así como deleitarse con rica langosta, caracol, pulpo, o camarón.... Es en conclusión, dejarse acariciar por la suave brisa y sentirse bienvenido por su gente......